Es nuestro ‘guardián’, un ejército defensivo que nos protege contra todo tipo de enemigos externos: el sistema inmunitario es un baluarte fundamental, y mantenerlo activo y saludable es la base de nuestro bienestar diario. Mantenerlo funcionando correctamente también es fundamental para poder desintoxicar el organismo de los desechos que se acumulan cada día: entonces, ¿cómo potenciar el sistema inmunológico para que funcione al máximo?
Muchos elementos de nuestro estilo de vida pueden tener un impacto negativo en nuestro sistema inmunológico, en primer lugar, el estrés; pero a través de buenos hábitos se puede hacer mucho para construir un sistema inmunológico saludable:
Fortalecer la respuesta inmune también significa mejorar la forma en que funciona el sistema linfático: la linfa que circula en los tejidos y recoge los desechos, recogidos en los capilares linfáticos, fluye hacia los ganglios linfáticos donde es aguardada por las células del sistema inmunológico, listas para intervenir, limpiar y desintoxicar el cuerpo de cualquier residuo. El sistema inmunitario y el sistema linfático están, por lo tanto, íntimamente relacionados y el buen funcionamiento de uno es necesario para el otro, del mismo modo que ambos son imprescindibles para la limpieza del organismo y, consecuentemente, para mantener un buen estado de salud.